Ya sea para mejorar el combate al narcotráfico o para detener las posibles rebeliones de grupos de extrema derecha, Evo Morales decidió reforzar los puestos militares en la frontera con Brasil.
El mandatario dijo que de esta manera se hará "una lucha frontal contra el narcotráfico y estos grupos extranjeros que llegan al país para atentar contra la democracia".
Si bien un mandatario debe demostrar su fortaleza y soberanía poniendo a su disposición toda la fuerza a su alcance para combatir las amenzas que se presenten tanto al interior de la nación como en su periferia y exterior, lo que resulta dudoso son los motivos que expuso para tomar estas medidas, pues no parecen ser adecuados... incluso resultan ridículos.
Si Evo Morales quisiera controlar el narcotráfico, primero debería controlar el Chapare, la principal zona productora de coca de Bolvia, para que en efecto, la coca sembrada en el lugar no tenga fines ilegales.
También es importante destacar que la Zona de Santa Cruz (lugar donde se dará el despliegue militar), jamás se ha caracterizado por ser una zona en la que se muestren actitudes reaccionarias o subversivas.
Y por último, es muy importante destacar que, mientras Evo Morales siga con su visión obtusa de que la Iniciativa Privada es la culpable de todos los males, se seguirá perdiendo de un gran aliado que podría, en un momento dado, coadyuvar a que el país salga del retraso y la pobreza en la que está inmerso.
No comments:
Post a Comment