Tuesday, December 7, 2010

Mi Post Número 100 - Un poco triste

Cuando comencé este blog, nunca pensé llegar a los 100 posts. De hecho ahora me sorprendo... ¿Cuántas cosas solemos comenzar que nunca terminamos? O que abandonamos pronto. Las clases de karate, las de yoga, las de pintura, las de natación, las de guitarra... el trabajo 1, el trabajo 2, el trabajo 1,000... El negocio que nunca comenzamos, las palabras que nunca dijimos, las personas que nunca conocimos, las oportunidades que nunca aprovechamos.

Hoy estoy un poco triste. No me malentiendan. Estoy un poco triste pero no deprimido. Estoy un poco triste pero quiero seguir trabajando en mis sueños y en lo que este blog representa para mí, un mundo que deseo, UN MUNDO QUE DESEO PARA TODOS.

No sé bien a qué se deba mi tristeza. Puede ser, sin duda, el ambiente navideño que se comienza a oler... El ambiente reflexivo que, para las personas críticas, nos hace ver que realmente pudimos dar mucho más de lo que dimos. Ahorramos pequeños trozos de vida que hubieran retribuído más si los hubiéramos lanzado al viento para construir un mundo mejor. Pero nos da miedo. Nos da miedo cambiar... Preferimos "Ser Felices y PLENOS estando CÓMODOS", cuando la verdadera Felicidad no sólo se alcanza reflexionando sobre nosotros mismos, yendo a psicólogos e intentando "estar bien por dentro" pensando que todo está mal y que sólo nosotros, como dioses, somos perfectos. La verdadera felicidad sólo se alcanza regalándonos enteremanete a la vida. Dar más de lo que somos, ser más de lo que podemos, ser lo invencibles y poderosos que todos podemos ser.

Otra de las razones por las que estoy triste es lo que acabo de leer hace unas horas. Quiero transcribirlo. Sé que algunos me escucharán, pero pocos lo entenderán. Y bueno, realmente no me importa si lo entienden, sólo quiero expresar lo que G. Edward Griffin, escribe en The Creature from Jekyll Island.

El propósito de la fundación [la Junta General de Educación de EE.UU., lo que correspondería a la Secretaría de Educación Pública en México] era usar el poder del dinero para influir en la dirección del proyecto educativo, y no, como mucha gente creía entonces, mejorar el nivel de la educación en Estados Unidos... El objetivo era usar las aulas para enseñar hábitos que invitaran a la gente a ser pasiva y obediente con sus superiores. Se intentaba -y aún se hace- producir ciudadanos con la preparación suficiente para realizar un trabajo productivo bajo supervisión, pero no tan despiertos como para cuestionar la autoridad o para intentar trepar en la escala social. La verdadera educación se limitaba a los hijos y las hijas de las élites. Para el resto, lo mejor era producir trabajadores hábiles sin otra aspiración particular que disfrutar la vida.
Las palabras de Griffin resuenan en mis oídos desde hace unas horas que las leí. Todo concuerda. Todo lo que he leído durante los últimos 10 años, abrió mi mente para que hoy pudiera aceptar, sin mayor sospecha, las palabras de este autor.

Estudié durante 18 años de mi vida para aprender a alimentar un sistema económico... Para trabajar para los sueños de otros, para los negocios de los ricos y poderosos, para constituir parte fundamental en el desarrollo político de unas cuantas personas poderosas. He trabajado durante 2 años y medio en el Gobierno, poniendo mi inteligencia, mi empeño y mi libertad para darme cuenta de que los proyectos en los que he trabajado últimamente, no sirven a la sociedad... Sirven para catapultar las ambiciones de algunos cuantos políticos que quieren "lucirse" diciendo que somos un país con tecnología.

Por eso, me da risa el esquema educativo actual... ¿Cuántos de mis amigos no desean estudiar una Maestría o la estudiaron ya? Y no sólo eso, sino que cuando la estudian, me ven por debajo del hombro diciendo: "Pero tú... ¿Por qué no estudias una maestría, si eras tan bueno? No desaproveches la oportunidad..." ¿Qué es lo que pasa con todos mis amigos que estudian una maestría por las razones equivocadas? Simplente regresan a su país o se quedan trabajando en un país al que no pertenecen, ganando un sueldo que los hace esclavos de su estilo de vida, al pago de su beca financiemiento, alimentando las grandes coorporaciones que disponen de sus vidas, de su tiempo... Las corporaciones que deciden cuándo tienes vacaciones, cuándo te aumentan tu sueldo, cuándo te puedes enfermar, cuándo tienes que viajar y una larga lista de etcéteras.

Por eso la gente se sorprende cuando, siendo uno de los mejores promedios de una Universidad muy cara en México, decidí trabajar en una empresa pequeña en la cual creo... Por eso la gente se sorprende cuando invierto en negocios que parecen tontos, como enseñarle a la gente a ganar dinero en un día o hacer multiniveles o poner panaderías. "¿Qué no eras tan bueno?" Suelen preguntarme. "¿Qué no te va bien en tu carrera?"

La semana pasada fui por un permiso a la delegación para poder dar los cursos del Money Weekend. Uno de los datos que solicitan es si tienes estudios. Yo contesté que sí. "¿Qué estudios tienes?" me preguntaron. Yo respondí: "Estudié ingeniería en Telemática". Y la señorita me dice: "¡Qué mal que no tienes trabajo! Sí, caray, la cosa está muy dura". Para ella, hacer un negocio es duro... Y sólo tienes "permiso" para hacer algo "por tu cuenta" si no tienes trabajo. Para mí es duro canjear horas de mi libertad por unas cuantas monedas.

Luego, pasé a la siguiente ventanilla y el que atiende me pregunta... "¿Tienes otro trabajo?". "Sí", le dije. "¿Qué haces?". Respondí que era complicado. "Tengo 3 negocios y doy consultoría en sistemas". El me dijo: "Bueno, Ok, consultor en sistemas. ¿Y cuánto ganas?". Le dije cuánto percibo al mes. "Bueno, mejor lo voy a dejar en blanco."

Estamos tan dormidos como sociedad, tan deprimidos, tan inmóviles... Que cuando a la gente le propongo que trabajemos juntos para hacer algo diferente, se espantan. Cuando a la gente la invito a invertir parte de su sueldo en un proyecto innovador, las personas piensan que me los quiero transar. ¡Qué triste!!

Y más triste la influencia de la televisión. Cuando a la gente la invito a leer un libro de motivación, a escuchar un audio, a ver un video, la gente piensa que es algo así como "autoayuda"... Y luego sale el imbécil de Eugenio Derbez ridiculizando a los conferencistas motivacionales y esto les da herramientas a la gente para desconfiar de lo que es diferente a lo que hacen. Finalmente, Eugenio Derbez y sus secuasez son bufones al servicio del imperio, el imperio que prefiere dar basura a la gente...

Tampoco quiero ser un Gárgamel. Hay muchas cosas bellas en el sistema educativo y en la televisión. Pero también hay muchas cosas que nuestro sentido común, nuestros gobernantes, nuestra televisión y nuestra educación critican, que son muy buenas para la gente y que la gente las rechaza de manera automática como si se tratara de "El Coco".

Pues bien, estoy triste por eso que leí, pero tengo un gran compromiso con mi país y con mi sociedad. Quiero formar personas que promuevan el cambio... Gente poderosa que ayude a todos a dejar de ser un esclavo del sistema económico, de su trabajo, de las crisis financieras, de los miedos colectivos, de todo aquello que destruye al hombre y lo hace más animal, para construir ese mundo que deseo para todos.

1 comment:

  1. Amigo, comparto mucho de lo que transmites en tu texto, sólo matizaría la visión de un sistema dominado por unos cuantos. Pues esa dicotomía que polariza a los "ricos y poderosos que dominan el mundo" vs. "los ciudadanos ingenuos esclavizados" es poco productiva. Más me parece que el sistema como tal tiene incentivos perversos que lo retroalimentan y sostienen. La necesidad de control social es una característica que siempre ha sido aprovechada por políticos, gobiernos y principalmente las religiones. Más gente conoce cuales son los pecados mortales que los derechos universales.
    Un abrazo, y más que tristeza deberías sentir alegría de poder entender cuales son las tripas del sistema.

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